En el ámbito del derecho laboral, existe un invitado al proceso que se llama el Fondo de Garantía Salarial (FOGASA). Este organismo administrativo depende del Ministerio de Empleo y Seguridad Social y es de vital importancia en la relación entre los trabajadores y las empresas. Su función es responder de las deudas salariales y de las indemnizaciones a las que tienen derecho los trabajadores en caso de insolvencia de la empresa en la que fuimos contratados.
Así pues, para que el FOGASA abone las prestaciones, lo primero que hay que obtener del Juzgado es la declaración de insolvencia del empresario, lo que se consigue cuando se ejecuta una sentencia que recoge el pago de cantidades económicas a favor del trabajador y resulta que la empresa no tiene bienes conocidos o estos no se pueden transformar en dinero.
Desde luego la responsabilidad del FOGASA no es plena respecto a las cantidades reconocidas en sentencia. Eso significa que, independiente de la cuantía que se nos reconozca en esta, el FOGASA responde hasta una cantidad previamente fijada por el Gobierno y que varía anualmente al tener como referencia el salario mínimo interprofesional.
Para el año 2018, estas cantidades fijadas son:
- Límite anualidad para indemnizaciones: 20.848,80 €
- Límite Salarios (120 días y que no superen los 6.854.4 €
Como dato hay que apuntar dos cosas: una, que desde el primer momento, el FOGASA tiene que ser demandado ante el Juzgado; y dos, que los acuerdos de las empresas y trabajadores ante el órgano administrativo conciliador (CEMAC, SMAC), no vinculan al FOGASA por lo que el organismo no responde en caso de insolvencia.
Una vez obtenida la declaración de insolvencia, el trabajador ha de iniciar un expediente administrativo reclamando esa prestación teniendo unos plazos para ello.
Todos estas fases, (la conciliación administrativa, la demanda judicial, la sentencia y el expediente administrativo en solicitud de prestaciones al FOGASA) son aspectos muy importantes que debe de dejar en manos de un buen equipo de abogados si quiere tener éxito.